La interconexión vial de las avenidas Lázaro Cárdenas, Gómez Morín y Morones Prieto entre Monterrey y San Pedro busca aliviar el tráfico que afecta a miles de vehículos diariamente. El proyecto iniciará en julio con una inversión millonaria, mejorando la movilidad entre estos dos municipios clave del área metropolitana. Se espera que las obras generen beneficios no solo en términos de movilidad, sino también en el desarrollo urbano y la calidad de vida de los regiomontanos.
Proyecto De Interconexión Vial: Impacto Directo En La Movilidad
Nueva Infraestructura Para Reducir La Congestión Vial
La interconexión entre las avenidas Lázaro Cárdenas, Gómez Morín y Morones Prieto se convertirá en un eje fundamental para mejorar la movilidad entre Monterrey y San Pedro Garza García.
En la actualidad, estos puntos de la ciudad sufren un tráfico excesivo, especialmente en las horas pico. La obra tiene como objetivo aliviar la congestión que afecta no solo a Lázaro Cárdenas, sino también a otras vías importantes como las Calzadas San Pedro, Del Valle y Vasconcelos.
Actualmente, más de 40,000 vehículos circulan diariamente por estas rutas, provocando un tráfico que se extiende por toda la zona. Las obras de interconexión permitirán que los conductores tengan acceso directo a la zona poniente sin la necesidad de tomar rutas alternas, como es el caso de las calles mencionadas.
Según el alcalde de San Pedro, Mauricio Fernández, este proyecto será un alivio significativo, evitando que los conductores busquen otras alternativas viales, lo que reducirá la presión sobre otras arterias del municipio y de Monterrey.
La obra, que se llevará a cabo en varias fases, iniciará con la construcción de un viaducto a nivel que comenzará en la intersección de la calle Río Tamuín y la Avenida Lázaro Cárdenas.
Desde allí, se extenderá hasta el Cerro de la Loma Larga, pasando frente al Poder Judicial de la Federación, y finalizará en la conexión con Morones Prieto.
La licitación para la construcción de la primera etapa se realizará en las próximas semanas, con el objetivo de iniciar los trabajos en julio y concluir la primera fase en noviembre de 2026.
Colaboración Entre Autoridades Y Sectores Privados
Inversión Y Coordinación Multinivel
El proyecto de interconexión vial es resultado de la colaboración entre diversos niveles de gobierno y sectores privados. El municipio de San Pedro es el principal promotor del proyecto, con una aportación inicial de 300 millones de pesos para la primera etapa.
Además, se contempla la participación de la Fundación Montemayor, que aportará otros 300 millones para los trabajos en el Cerro de la Loma Larga.
En un encuentro reciente entre el alcalde de Monterrey, Adrián de la Garza, y el de San Pedro, Mauricio Fernández, se acordó que el Gobierno Estatal, a través de la Secretaría de Movilidad, también apoyará el proyecto con una aportación que se distribuirá entre 2026 y 2027.
Este esfuerzo conjunto tiene como objetivo asegurar que las obras se realicen de manera eficiente y con el mínimo impacto en la vida cotidiana de los habitantes.
Impacto Económico Y Urbano
Este megaproyecto no solo busca mejorar la movilidad, sino que también tendrá un impacto importante en el desarrollo económico y urbano de la región.
La mejora en la infraestructura vial atraerá inversiones a las zonas cercanas a las avenidas interconectadas, lo que fomentará el crecimiento de nuevas áreas comerciales y residenciales.
Además, se espera que la mayor fluidez vehicular impulse la competitividad de Monterrey y San Pedro como destinos de negocios y turismo.
La ejecución de este proyecto contribuirá a una mayor accesibilidad a zonas clave para el desarrollo económico, como el sur de Monterrey y la zona residencial de San Pedro.
Por ello, se considera un paso clave para la modernización de la infraestructura metropolitana, alineándose con los esfuerzos de otras ciudades para mejorar sus sistemas de transporte y conectividad.
Medidas Ambientales Y Compromiso Con El Medio Ambiente
Monterrey Implementa Medidas Para Reducir Impacto Ambiental
Uno de los aspectos más relevantes del proyecto de interconexión vial es el compromiso con el cuidado del medio ambiente. Aunque las obras de infraestructura suelen generar un impacto en el entorno natural, las autoridades municipales han asegurado que se implementarán diversas medidas para minimizar los efectos negativos.
Esto incluye la restauración de áreas verdes y el uso de tecnologías sostenibles en la construcción de la obra.
Además, el alcalde de Monterrey, Adrián de la Garza, ha manifestado su compromiso con la protección del medio ambiente, destacando que, junto con el proyecto de interconexiones, se trabajará en paralelo con el desarrollo de nuevas áreas verdes y espacios públicos en los alrededores de las principales vías.
La idea es que, al mejorar la conectividad vial, también se promueva un entorno más limpio y accesible para los ciudadanos, con mayor espacio para actividades recreativas y deportivas.
Beneficios A Largo Plazo Para Los Habitantes
La ejecución de este proyecto generará varios beneficios a largo plazo para los habitantes de Monterrey y San Pedro. En primer lugar, se espera una reducción significativa en los tiempos de traslado, lo que permitirá a los conductores llegar a su destino de manera más rápida y eficiente.
Además, el impacto en la calidad de vida será notable, ya que la reducción de la congestión vehicular contribuirá a un ambiente más tranquilo y menos contaminado.
Asimismo, el proyecto fomentará el desarrollo urbano de las áreas aledañas, haciendo que más personas se interesen en vivir y trabajar en estos municipios. Esto, a su vez, impulsará el crecimiento económico local, ya que mejorará la accesibilidad a zonas clave para los negocios, el comercio y el turismo.
Un Proyecto Crucial Para La Movilidad Regia
Este megaproyecto de interconexión vial es considerado como uno de los más importantes para el área metropolitana de Monterrey, ya que no solo aliviará el tráfico vehicular, sino que también potenciará el desarrollo económico y social de la región.
A través de la colaboración entre diversos actores políticos, sociales y privados, se espera que esta obra beneficie a cientos de miles de personas, convirtiéndose en un pilar clave de la infraestructura de la ciudad en los próximos años.
Las autoridades locales han asegurado que las obras comenzarán en julio de 2025, con un cronograma que se extenderá hasta 2027.
De esta manera, Monterrey y San Pedro avanzan en su compromiso por mejorar la conectividad, la movilidad y el bienestar de sus habitantes, dando un paso crucial hacia una ciudad más moderna y eficiente.
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