Ifigenia Martínez es Despedida por Líderes en la CDMX

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La tarde del domingo, en una solemne ceremonia, se llevó a cabo el funeral de Ifigenia Martínez en una funeraria ubicada al sur de la Ciudad de México. Familiares, políticos y académicos se reunieron para rendir homenaje a una de las figuras más importantes del panorama político y académico de México, una mujer cuya vida y carrera dejaron una huella profunda en diversas esferas del país. Con 98 años al momento de su fallecimiento, Martínez fue testigo y protagonista de momentos históricos clave, y su legado, que abarca casi un siglo, continúa siendo una referencia tanto en la política como en la educación.

Ifigenia Martínez falleció el pasado sábado en su hogar de manera natural, apenas unas horas antes de las 22:00, luego de haber enfrentado un delicado estado de salud que la llevó a ser hospitalizada el 14 de septiembre. Su partida ha sido descrita como una “lamentable pérdida” por quienes la conocieron y admiraron, y su memoria será honrada en diversos actos públicos que se llevarán a cabo en los próximos días.

Despedida con presencia de grandes figuras

Al funeral asistieron destacadas personalidades del ámbito político y académico, subrayando la importancia que Ifigenia Martínez tuvo para el país y los diversos sectores en los que desempeñó un papel trascendental. Entre los asistentes se encontraban la presidenta de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, quien ha manifestado en varias ocasiones su respeto por el legado de Martínez. La presencia de Sheinbaum no fue sorprendente, pues ambas mujeres compartían un compromiso profundo con el fortalecimiento de la democracia y la justicia social.

Otra figura relevante que acudió a la despedida fue Norma Piña, presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, un cargo que, al igual que Ifigenia, simboliza la lucha de las mujeres por ocupar espacios de poder en un país históricamente dominado por hombres. La presencia de Piña en la ceremonia subraya la relevancia de Martínez como pionera en la lucha por los derechos de las mujeres y la equidad de género en el ámbito público.

Además de las autoridades, también asistieron académicos de renombre, como Lorena Rodríguez, directora de la Facultad de Economía de la UNAM, una institución con la que Ifigenia Martínez mantuvo una relación cercana durante toda su vida. Martínez, quien fue una de las primeras mujeres en obtener un doctorado en economía por la UNAM, se destacó tanto por su carrera académica como por su trabajo político, lo que la convirtió en una figura única, capaz de moverse con soltura en ambos mundos. Su compromiso con la educación y su defensa de una economía más justa para todos fueron algunos de los pilares que guiaron su vida profesional.

Un legado que trasciende generaciones

Ifigenia Martínez nació en 1925 en la Ciudad de México, en un periodo en el que el país comenzaba a redefinirse tras la Revolución Mexicana. Creció en un entorno donde la política y la economía empezaban a adquirir una nueva dimensión, y su carrera profesional estuvo marcada por su deseo de construir un país más equitativo y justo. Durante sus años de formación, fue testigo de cambios profundos en la estructura social y política de México, lo que la impulsó a involucrarse activamente en la vida pública.

Martínez dedicó gran parte de su vida a la educación, no solo como académica, sino también como mentora de generaciones de economistas y politólogos que hoy ocupan cargos clave en México. Su compromiso con la educación no se limitó a las aulas; fue una de las primeras mujeres en ocupar cargos de alta relevancia política, convirtiéndose en una referencia para muchas jóvenes que buscaban abrirse camino en un entorno predominantemente masculino.

Su influencia fue tal que no solo dejó una marca en la academia, sino también en la política. Fue una de las fundadoras del Partido de la Revolución Democrática (PRD), una agrupación política que nació con el objetivo de ofrecer una alternativa de izquierda frente a los partidos tradicionales. A lo largo de su vida, Ifigenia Martínez luchó incansablemente por una política más inclusiva, por los derechos de las mujeres y por una economía que favoreciera a los sectores más desfavorecidos de la sociedad.

Último homenaje de Ifigenia Martinez en
San Lázaro

Durante el funeral, el coordinador de Morena en la Cámara de Diputados, Ricardo Monreal, expresó sus condolencias a la familia y destacó la gran pérdida que representa la muerte de Ifigenia Martínez para el país. “Es una lamentable pérdida, no solo para la política, sino para todos los que la conocimos y aprendimos de su ejemplo”, afirmó Monreal, visiblemente conmovido por la partida de una mujer que, según sus palabras, siempre luchó por el bienestar de México.

Monreal anunció que el próximo lunes se llevará a cabo un homenaje luctuoso en el Palacio Legislativo de San Lázaro, un lugar que fue, en muchos sentidos, el segundo hogar de Ifigenia Martínez. Ahí, se expondrá su cuerpo por última vez, permitiendo a amigos, colegas y admiradores despedirse de una de las figuras más influyentes de la política mexicana contemporánea. Este acto busca rendir tributo a su labor legislativa, una etapa que fue crucial en su carrera y en la transformación del país.

En el evento, también se destacó la importancia de su labor en la lucha por los derechos de las mujeres. “Ifigenia soñaba con ver a una mujer en la presidencia de México”, comentó la diputada Olga Sánchez Cordero, quien, al igual que Martínez, ha sido una de las principales defensoras de los derechos de las mujeres en la vida pública mexicana. Su sueño, en muchos sentidos, se ha visto materializado con la creciente presencia de mujeres en altos cargos del gobierno, aunque, como ella misma habría dicho, “todavía queda mucho por hacer”.

Sánchez Cordero también hizo énfasis en el hecho de que Ifigenia Martínez fue una pionera en muchos aspectos, y su lucha por la equidad de género es una de las más importantes. “Gracias a ella y a mujeres como ella, hoy nos encontramos en posiciones de poder, y tenemos la responsabilidad de continuar su legado”, afirmó la diputada.

Un futuro marcado por su ejemplo

La vida de Ifigenia Martínez es un ejemplo de cómo una mujer puede transformar el curso de la historia, no solo a través de la política, sino también desde la educación y la academia. Su muerte marca el final de una era, pero su legado continuará inspirando a futuras generaciones de mexicanas y mexicanos que buscan construir un país más justo y equitativo. Desde sus primeras incursiones en la política hasta sus últimas intervenciones en el Congreso, Martínez siempre tuvo claro su objetivo: luchar por un México mejor.